Un elemento primordial de la globalización es Internet, esto tiene sus ventajas, partiendo de que es un medio de comunicación masivo, elimina distancias, se utiliza tanto en el ámbito económico como comercial (servicios), es ocupado por grandes empresas. También es una herramienta que sirve al gobierno para llevar a cabo diferentes acciones de tipo político, social, cultural, educativo y otras.
Por este medio se maneja información (de manera inmediata), en otras palabras conocimiento del cual existe un intercambio masivo.
No hay que dejar de lado a aquellos que no tienen acceso a este medio por cualquier circunstancia, esa sociedad rezagada, excluida pierde oportunidades en el Chile globalizado, para contrarrestar esta situación, se habla de la democratización de contenido – información – que se refleja en la implementación de los Tics en aula y en la capacitación de adultos mayores, éste último a través de cursos gratuitos impartidos en bibliotecas públicas, sin embargo, aunque es una iniciativa beneficiosa no eliminará las brechas mientras exista gente que no tenga acceso a este medio, una posible solución es que Internet sea de uso público (GRATIS).
Por su parte se está gestando una sociedad individualista, pues todo se puede hacer de manera autónoma solo a un clic y postrado en una silla. Si nos sedentarizamos en la era paleozoica ahora nos sedentarizamos de la ciudad a nuestras casas o lugares de trabajo. ¡Todo vía Internet!, este medio está absorbiendo a los otros. Aún así viendo algunas ventajas y desventajas, ¿es realmente indispensable este servicio en nuestro diario vivir?, a mí pensar: “NO”. Lo que sucede es que se le da demasiada importancia, es la moda tener Internet en casa.
Todo se hace frente a una pantalla, esto me hace pensar en una película “infantil”: wall-e. A mi juicio apta para adultos con corazón de niño, en ella se ven humanos -dominados por máquinas- conectados sólo por una pantalla, no hay contacto físico, no saben de su entorno, incluso diría que ni siquiera notan la presencia de las máquinas… ¿Vamos hacia esa realidad, quizá? Como estudiante, he presenciado el cambio en algo tan común como el colegio, percibo menos contacto entre los niños pequeños, están más egoístas y “agrandados”.
No se puede negar que la llegada del computador (Internet) al hogar trajo sus consecuencias, entre ellas la que más sobresale: alteró la crianza, la infancia. Junto con la televisión, hacen que esas “realidades” que nos muestran se entremezclen con la cotidianeidad de la vida. Toda esa realidad virtual que nos muestra el computador afecta directamente nuestro modo de percibir, actuar, relacionarnos, por mencionar. Y el reflejo de esto son los niños.
Ya entramos en una era global-digital, todo tiene sus ventajas y desventajas, pero no hay que descuidarse, no debemos olvidar las raíces, los sentimientos, no nos puede dominar la globalización, no podemos convertirnos en máquinas.
Por este medio se maneja información (de manera inmediata), en otras palabras conocimiento del cual existe un intercambio masivo.
No hay que dejar de lado a aquellos que no tienen acceso a este medio por cualquier circunstancia, esa sociedad rezagada, excluida pierde oportunidades en el Chile globalizado, para contrarrestar esta situación, se habla de la democratización de contenido – información – que se refleja en la implementación de los Tics en aula y en la capacitación de adultos mayores, éste último a través de cursos gratuitos impartidos en bibliotecas públicas, sin embargo, aunque es una iniciativa beneficiosa no eliminará las brechas mientras exista gente que no tenga acceso a este medio, una posible solución es que Internet sea de uso público (GRATIS).
Por su parte se está gestando una sociedad individualista, pues todo se puede hacer de manera autónoma solo a un clic y postrado en una silla. Si nos sedentarizamos en la era paleozoica ahora nos sedentarizamos de la ciudad a nuestras casas o lugares de trabajo. ¡Todo vía Internet!, este medio está absorbiendo a los otros. Aún así viendo algunas ventajas y desventajas, ¿es realmente indispensable este servicio en nuestro diario vivir?, a mí pensar: “NO”. Lo que sucede es que se le da demasiada importancia, es la moda tener Internet en casa.
Todo se hace frente a una pantalla, esto me hace pensar en una película “infantil”: wall-e. A mi juicio apta para adultos con corazón de niño, en ella se ven humanos -dominados por máquinas- conectados sólo por una pantalla, no hay contacto físico, no saben de su entorno, incluso diría que ni siquiera notan la presencia de las máquinas… ¿Vamos hacia esa realidad, quizá? Como estudiante, he presenciado el cambio en algo tan común como el colegio, percibo menos contacto entre los niños pequeños, están más egoístas y “agrandados”.
No se puede negar que la llegada del computador (Internet) al hogar trajo sus consecuencias, entre ellas la que más sobresale: alteró la crianza, la infancia. Junto con la televisión, hacen que esas “realidades” que nos muestran se entremezclen con la cotidianeidad de la vida. Toda esa realidad virtual que nos muestra el computador afecta directamente nuestro modo de percibir, actuar, relacionarnos, por mencionar. Y el reflejo de esto son los niños.
Ya entramos en una era global-digital, todo tiene sus ventajas y desventajas, pero no hay que descuidarse, no debemos olvidar las raíces, los sentimientos, no nos puede dominar la globalización, no podemos convertirnos en máquinas.
Marisol Alejandra Latorre Guzmán
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